Y todo empezó con una pregunta inocente ( y un tanto estúpida por mi parte)
- ¿De qué te quieres disfrazar este año cariño?
Maldita la hora!. Una semana entera acostándome a las tantas de la madrugada, que es cuando dispongo de algo de tiempo material. En vez de ir a la tienda y comprar el que me pareciese no, yo a preguntar a mi niño. Y tras varios quebraderos de cabeza, varias cosidas de dedos(no tengo máquina coser) y quedarme algo Kumbayá (pa qué negarlo) por la pintura ya a última hora, el resultado fue éste:
Mi Anubis particular(sólo por verle la carita mereció la pena)
2 comentarios:
JEJE... pues te quedó muy bien!
Besos.
a que si? jejeje gracias querido pipero
Besos
Publicar un comentario